Gastronomía asturiana, Información y fotos de la gastronomía de Asturias
La gastronomía asturiana se caracteriza por la variedad de productos autóctonos y por la versatilidad culinaria que de ellos resulta.
El clima y la riqueza de los suelos generan una huerta variada y pródiga en cosechas, patatas, tomates, lechugas, fréjoles (judias verdes), arbeyos (guisantes), repollos, cebollas, pimientos, coliflores o alcachofas, son parte del abanico de hortalizas que emplea la cocina asturiana. No podemos olvidar les fabes, alubias grandes y blancas, ingrediente esencial del plato por excelencia de los fogones astures: la fabada.
De las frutas, la manzana es la protagonista indiscutible, en la mesa o en la dorada bebida que traspasa fronteras: la sidra, caldo mágico que evoca tonadas y fomenta la amistad al compartir el culín escanciado. Encontramos en Asturias, además, otras frutas como los figos (higos), naranjas y limones, fresas, ablanes (avellanas), castañas o nueces.
En los bosques y pastizales crece una amplia variedad de hongos y setas, como champiñones, boletus, partinas, lepiotas, senderuelas, níscalos, setas de cardo, colmenillas, corpiños, etc.
La costa cantábrica es prolija en pescados y mariscos. En las rulas asturianas abundan especies como la merluza, el pixín (rape), el besugo, la chopa (sargo), el salmonete, la lubina, el bonito, la sardina, el bocarte…
En cuanto a los mariscos, el oricio (erizo de mar), la llámpara, la andarica (ñecora), la ñocla (buey de mar), el centollo, el bugre (bogavante), las cigalas, las quisquillas, las almejas y los percebes están entre las especies más solicitadas, sin olvidar el pulpo de pedrero, los calamares y los chipirones. Los ríos asturianos colman la mesa de salmones, truchas o angulas.
En cuanto a carnes y embutidos, las razas autóctonas vacunas son protagonistas. En los últimos tiempos, la apuesta decidida por la carne roxa (roja) trae a nuestras mesas un producto de alta calidad.
En el Principado encontramos el pitu de caleya, pollo de aldea alimentado sin piensos, y una inmensa variedad de productos procedentes del gochu (cerdo), como chorizos, morcillas y chosco. En la temporada de caza también se cocinan perdices, arceas (becadas), jabalí, rebeco, corzos, gamos o venados en las zonas de montaña de toda la región.
El Queso
Protagonista en la gastronomía asturiana también es el queso de vaca, oveja y cabra. En Asturias encontramos probablemente la mayor variedad de quesos de Europa.
El rey indiscutible es el Cabrales (concejos de Cabrales y Peñamellera Alta), aunque no le van a la zaga el Gamonéu (Onís y Cangas de Onís), Xiestoso (Cangas de Narcea), de Fuente (Proaza), de Bota (Quirós), de Vixiga (Lena), el Casín (Caso, Sobrescobios), Afuega´l Pitu (Morcín, Riosa, Grado, Salas), Porrúa, Vidiago, Pie de la Sierra, San Roque del Acebal y Pría (Llanes), Beyos (Ponga y Amieva) o el de Abredo (San Martín del Rey Aurelio), Rozagás (Peñamellera Alta), Buelles (Peñamellera Baja), La Preal (Illias), Valdesano (Valdés), Urbiés (Mieres), o de Oscos (Grandas de Salime).
Platos Dulces
El panorama gastronómico se completa en la sobremesa con una innumerable cantidad de platos dulces típicos. Entre ellos hay que citar el arroz con leche quemado con plancha, los frixuelos, las casadiellas, los borrachinos, el panchón, las marañuelas de Gozón y Carreño, los carajitos de Salas y Cornellana, las veneras de Navia y Boal, los tocinillos de cielo de Grado, la tarta de Piloña en Infiesto, la charlota y la tarta gijonesa en Gijón o los carbayones en Oviedo.
Sidra de Asturias
Esta bebida, consumida ya en la edad media, se obtiene a partir del mosto de manzana prensada en el llagar y fermentada en toneles de castaño (pipas). Fresca y con bajo nivel de alcohol, entre 4 y 6 grados, es objeto de culto en las espichas -fiestas gastronómicas populares donde se degusta sidra como bebida principal, directamente del tonel o en botellas- que se celebran en las sidrerías y chigres de la región. Es llamativo el modo de echar (verter) la sidra y su degustación. Anualmente se celebran festivales y concursos. El 24 de octubre de 2002 el Consejo de Gobierno del Principado de Asturias aprobó con carácter transitorio el reglamento de la Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) Sidra de Asturias.
Vinos de la Tierra de Cangas
Aunque el cultivo de la Vid en Asturias tiene una tradición que se remonta a la época romana, actualmente sólo se produce vino en algunos concejos del occidente -Cangas del Narcea, Pola de Allande, Ibias, Pesoz…- Las variedades de uva autóctona son carrasquín, verdejo, albarín y mencía, siendo esta última la de mayor producción. En estos momentos cuentan con la indicación Geográfica Protegida (IGP) Vino de la Tierra de Cangas en las variedades tinto y blanco. Son vinos jóneves, de baja graduación, buen gusto y un cierto grado de acidez. Tradicionalmente se toma en un cuerno de madera, llamado «cachu».